4.febrero.18

Monologando

acaso no lo son todos los posts 🤔

Y aquí pues, inmersa en mis pensamientos, aprovechando las tranquilas horas de la noche para poner un poco de orden en mi cabeza.


Y ese no es precisamente un trabajo fácil, después de todo, soy yo: con la cabeza a mil por hora y con tantas cosas que divago con facilidad la mayor parte del tiempo.


Hace mucho que no sentía ganas de escribir, ni aquí ni en redes sociales, ¿qué interesante podía plasmar? ¿lo qué nos trajo Santa? ¿resoluciones (nunca me llamaron la atención y no creo empezar ahora)? ¿dar consejos que ya están refritos en internet? ¿pasarme haciendo imágenes con frases como hoy tengo ganas de descansar' o 'no gracias, no me digas eso si no eres madre' sólo para postear y ya? ¿o andar diciendo a cada rato en el fanpage 'hoy mi hijo hizo, o mi esposo me dijo, u hoy pienso que?


Uff, antes de hacer algo de eso mejor no escribo y de hecho no lo hice, supongo que para mí es como perder el tiempo y en la maternidad eso es un SACRILEGIO.


Claro, si algo me gusta lo suficiente y considero que les puede interesar lo comparto, o si es algo que me ha funcionado a las mil maravillas y alguien no lo dijo en las últimas 72h lo posteo (sí, reviso siempre para no andar de repetidora que eso también me aburre).


Y también está aquello de que ya mi A. está creciendo y las cosas con él son más estables y casi iguales todos los días, aunque claro, aún hay cosas que no logramos superar como la resistencia a comer pero seguimos en la lucha.


Lo que más me sorprende es notar con 'Un día como hoy' de Facebool que cada día tenía dos o tres fotos sobre el desarrollo de A. hasta que cumplió los 2 años más o menos, y ver como ya la intensidad de publicaciones bajó, supongo que superé la llamada 'fase Mamarazzi o mejor dicho la Mamarazzi facebookera', porque de tener fotos diarias tengo y de historias para papá sobre lo que hace y deshace el peque siempre hay.


En fin, sigo teniendo un montón de ideas, de ilusiones y desilusiones, de planes que fracasaron y de nuevos planes (menos rendirse eh), sigo buscando maneras de mejorar para con mi hijo y con quienes me rodean, de desarraigar malos hábitos, pero sobretodo disfruto lo que nos da la vida, de las risas que brotan de la nada, de los pequeños abrazos sólo para abrazar y de ir de la mano de mi hijo y que me diga 'te amo mama' por que le nace decirlo sin motivo aparente.


No pretendo ser consejera, ser modelo a seguir o decir como hacer algo que el instinto te enseñara a hacerlo de la mejor manera para tu familia, simplemente muestro como es mi vida en familia, en un país que últimamente no va de la mejor manera pero en el que viven todos los que quiero y necesito a mi lado y sólo por eso es el mejor lugar del mundo para vivir.

B.

mamá antisocial de un tween extrovertido... chocohólica empedernida... criadora de pikmins... y a veces trabajo con código...

la autora